Una vuelta en la cama,
mientras la voz de una vetusta diosa,
me susurra su desvelo.
Será una de mis líneas.
Me contaron cómo se juntan estas
para hacer un conjunto coherente,
pero sigue sin tener sentido.
Adormecida o no,
dictaba una sentencia
aún no escrita por mi pluma,
aún no impresa en mi vida.
Somnolienta o no,
separo cada uno de sus bisbiseos
reptantes hasta mis oídos.
Sólo hasta ellos.
Dirijo toda la concentración
a un punto
ya etiquetado,
con anterioridad.
Haciendo mella en él,
llenando el hueco
con una vuelta en la cama
a la que sobreviví
terminando una línea más.
Gema Albornoz
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Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.com/.
Emociones encadenadas 
Así se vive cuando escribir es sangre y aire a la vez.
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Así mismo.
¡Un abrazo, Poetas Nuevos! 😊🎈🎈🎈🎈
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Me sentí totalmente identificado, gracias por escribir y cuando puedas dale saludos a Natalia, nunca tuve respuesta de vuelta.
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Si hablo con ella, se los daré, incluso si tengo posibilidad de decirle algo más lo haré. ☺️
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Domo arigato
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😉
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Realmente es así… 🙂
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Sí, aunque puede tener algunas variaciones. 🙂
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