Cierro los ojos
e inspiro
el aroma a roble
que golpea mi nariz.
Marcan las gotas
que se deslizan
por los lados,
el deseo por volver
a hablarte.
Como muchos otros contaron
ahogaron sus palabras así.
No servirá de nada
puesto que saldrán a flote.
Tras este cristal
no hay tragedias reflejadas.
Tan sólo una realidad distorsionada.
Cierro los ojos.
Inspiro.
Doy un trago
y sé que no habrá otra copa más.
Al menos esta noche.
Gema Albornoz
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Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.com/.
Emociones encadenadas 
Con una copa de jerez o de manzanilla no desaparece la sed pero sienta muy bien. 😉
Feliz domingo guapa.
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Reconozco mi debilidad por los vinos de mi zona, aunque no hago miramientos a una copa de un buen vino. 😀
Feliz domingo, Antonio.
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Como ha de ser, lo que es bueno siempre sienta bien, sea de donde sea. 😉
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