Vayas donde vayas
no tienes escapatoria.
Te estarán vigilando
como si fueses, ahora,
su único centro de atención.
Haciendo zoom
y pequeños ruidos,
pero extraños,
que te distraerán
de lo que estabas pensando.
Céntrate.
No pienses en las paredes satinadas
que tiene la habitación.
Ni en los velos de novia
que cuelgan por todas partes.
Se mueven con las corrientes de aire.
No preguntes de dónde salen.
Reposa un rato en el sofá caoba
que es de estilo victoriano
con acabado francés.
No te mueves demasiado
y deja espacio para tu niña interior.
Que te de la mano
y sin rozar el suelo
siga balanceando los pies
mientras se rebobinen los carretes.
Gema Albornoz
Esta obra de Gema Albornoz está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Gema!!! Ay vuelvo y aquí está un poema tuyo, como siempre produciendo emociones dispares. Y me produce libertad y claustrofobia a la vez, cómo puede ser?? Un abrazo!!!
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Nataaaaaaaaaaaliaaaaaaaaaaaa.
Pues no sé. ¿Puede que quisiera algo así? Jajaja.
Me da alegría tenerte por aquí. 😀 😀 😀
Un abrazo gigantescooooooooooooo.
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Es el ojo que todo lo ve.
Quizá es indiscreto.
Saludos.
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Puede ser.
Siete pequeños y un Gran Ojo indiscreto.
Saludos, Efe.
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Muy bueno, Gema.
Enhorabuena.
Un abrazo y buena semana.
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Muchísimas gracias, Javi.
Buena semana. 😀 😀
Un abrazo.
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Ayyy ¡qué loco, amiga! En lo primero que pensé fue en una reclusión en una institución de enfermos psiquiátricos. Me he sentido protagonista de Birdy, ese film de Alan Parker…
Besos surrealistas desde un lunes bien real. 😉
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¡Ayyy, Vero! Creo que es uno de los escenarios posibles.
Así que no me extraña. La película me suena como muy lejana, pero ya tendré tiempo de verla. Me gusta comprobar esas referencias. 🙂
Besos, querida amiga.
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Pelos como escarpias. En serio, me gusta mucho lo que haces. Sobre todo tu forma de describir los lugares. Sigue así.
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Muchísimas gracias, Ángel.
Por tu comentario y tus palabras.
Me hiciste releer tu primera frase impresionada. 😀
Un saludo. 😉
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Aprecio mucho las buenas descripciones. Es algo que, o se sabe hacer, o no se sabe hacer, y es algo que intento hacer cada vez mejor. Por eso, insisto, que me gusta leeros porque aprendo bastante.
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Todos aprendemos, tanto de no parar de escribir y seguir intentando hacerlo cada vez mejor. Como de leer a otros.
Un honor, Ángel. Por aquí seguiremos. 😀
Un abrazo.
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Me encanta la imagen de la niña que balancea los pies que cuelgan. Besos, Gema.
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También me gustó a mí. 😀
Un abrazo.
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