Sin nombre

Soy una escritora sin nombre. La tira gira, el sol a su alrededor. Mi nombre nace de la tierra, se moja, florece y cae de vuelta como polvo. Y gira, gira. Y baila, baila. Entre las hojas y a sus anchas. Soy sin nombre, mi único cargo es ser aun sin ser dicha.

Las horas

Se acerca la hora negra y no habrá excusa para no abrirle la puerta. Echará del lugar a las horas blancas y amarillas. Rondará alrededor de las azules y rojas. Y si la dorada se aproxima a primera hora de la mañana o de la tarde, cuando el atardecer repose, yacerán en asamblea: la negra… Leer más Las horas

Tus flores

Secar tus flores entre mis páginas. Guardar con ellas los sentimientos y parecer infantil cada vez que las miro y las cuelgo al viento. Jugar a turnos las palabras. Esas que llegaron tarde o que vinieron descalzas. Tus flores secas, secas, entre mis marras.

Verificación en seis pasos de la primera fase del sueño — SALTO AL REVERSO

Pero cuando adormeces sin lágrimas, paces. Sin embargo, no fluyen aisladas las perlas cristalinas. Aunque el cohorte esté alerta a todo tipo de estímulos. No obstante, cabeza y extremidades reposan a la inquietud muscular. Pero continúa la vigilia. Ahora bien, desconectarse del entorno es la entrada a la siguiente fase. a través de Verificación en… Leer más Verificación en seis pasos de la primera fase del sueño — SALTO AL REVERSO

Cántico de cuna

Cántico de cuna traes a los zapatos lumbre y farolillos al desconsuelo. Cántico de cuna vienes cargado de noches esdrújulas, con estrellas agudas y llanas. Cántico de cuna vagas del romance a la ocurrencia, en una vuelta de tuerca. Cántico, cántico de cuna galanteas con el cristal de la persiana bajada, al reflejarte desnuda, clara… Leer más Cántico de cuna

Sueños lúcidos

Comprenderás tus versos reveladores cuando pongas el motor de otros en marcha. Tus suelas vibrarán llenas de historias. Retumbarán desde tus pies a tus manos y de ahí a miles de oídos. Se contraerán con el martillazo de tus ondas. Atravesarás el camino como el rayo que crece entre las copas o el fuego que… Leer más Sueños lúcidos

Abrió la puerta

Abrió la puerta y me recibió una mesa con un manojo de sillas alrededor. Todos los asientos estaban fríos, desiertos y desolados casi tanto como yo. Al sentarme cobijé mi cuerpo en un búnker donde las palabras rotaban sobre sí mismas. Quien se resistió a la tormenta sabe cómo atravesar puertas en el mundo invisible.… Leer más Abrió la puerta

Laurel

Laurel verde de ramas fuertes noble creces y perenne floreces. Laurel verde de bordes ondulados y primavera breve, tus bayas reblandecen con pasajera sombra de aroma que nombra.