Dibujas la vera con la punta de tu pluma
y cuestiono si la frontera es real o hasta dónde
llega. Rechazaré todos los opuestos, incluidos a
los que me incluyen. No te buscaré para encontrarte.
No te encontraré aferrándome a ti, vida; aterrorizada
de muerte por perderte. Obsesionada a perderte, mal
de muerte. Manipulo los opuestos y controlo la frontera que
es una vera que esquiva y elude la atracción de norte y sur; de
todos los opuestos irreconciliables que viven en la luna y duermen
plácidamente en el sol. En los opuestos irreconciliables, nuestra ficción.[Leer en Salto al reverso]
a través de Opuestos irreconciliables — SALTO AL REVERSO