Ocho segundos hasta el equilibrio
Ocho segundos para que mis impulsos reaccionen a tu olor y agiten hasta lo más profundo de mis nervios, hasta mi cerebro. Capto, entonces, el frío y el calor envolvente de tu piel. Ocho segundos para deleitarme con tus hojas: largas, suaves y esplendorosas. Y ondee una de ellas. Beso, entonces, tu estrella de mar… Leer más Ocho segundos hasta el equilibrio