
VER una fila de luciérnagas
dibujando la carretera por donde pasa tu olor.
No es un desorden de mi sistema nervioso,
es que no se coordina el corazón.
Mi seguridad,
entonces,
se sitúa al borde del acantilado,
Mi pánico
no sabe si volar
o divertirse rodando
loma abajo.
A menudo,
te recreo en mi infancia,
rebobino,
damos saltos al futuro,
volvemos al ahora mismo.
Eres mi alucinógeno favorito
y nadie te había clasificado como droga.
¿Conocéis la revista literaria digital El coloquio de los perros? Pues ¡ya estáis tardando! ☺️🎈🎈🎈🎈
Debe estar conectado para enviar un comentario.