
Camino.
El frío acaricia mi cara.
Su caricia no es abrigo
es puñal afilado en mi piel.
Camino.
El viento me llama
por mi nombre.
Miro hacia atrás,
es el viento del norte.
Quiere demostrarme su fortaleza.
Me envuelvo en mis ropas
y subo mi bufanda.
Le grito que no soy Helios
ni tampoco soy viajera
en medio de su lucha.
No era quien para convencerme.
Continué hasta abrazar el contraste.
Llegó motivado por seiscientos miligramos,
pequeños comprimidos recubiertos,
copos de nieve que huelen a papel mojado.
Daba igual el orden: frío, viento; viento, frío.
Daba igual si no era el olor exacto.
Daba igual.
Ese día escribieron en mi piel.
Gema Albornoz
Esta obra de Gema Albornoz está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.com/.
Me gustó mucho tu forma original y realista de describir la naturaleza.
Hermoso texto
Felicidades!!
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Gracias. 😀
Bievenido, por cierto, que no tuve la oportunidad.
Espero que siempre que pases por aquí disfrutes de igualmente.
Un saludo. ☺🎈🎈🎈🎈
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Siiii🌹
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Me gusta, para que negarlo.
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🙂
Muy agradecida por qué no decirlo. 😊🎈🎈🎈🎈🎈
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Pecando de descaro, me gustaría que vieras mi última entrada, no te lo iba a decir pero porqué no decirtelo, es la primera vez que he escrito algo que podría denominarse poesía. No sé, simplemente me ha salido y me gustaría saber tú opinión. Sí gustas o sino, no :3
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Claro que sí, me paso en un momento.
Me disculpo si no me paso todas las veces que quisieras pero el tiempo es algo de lo que escaseo.
Un abrazo. 🙂
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