
Cuando se acerca la hora,
me pongo nerviosa,
me tiembla un poco el pulso,
como si fuese la primera vez.
De nuevo, me esperas ahí,
en el mismo lugar de siempre.
Cuando se acerca la hora,
lo siento en el cuerpo,
no me hace falta
echar la vista al reloj.
Mis pasos se dirigen solos
hacia el sitio donde sé que estás
esperándome y como siempre sonriendo.
Cuando se acerca la hora,
los demás parecen desaparecer.
El ruido se hace silencio.
Y me quedo contigo a solas.
Gema Albornoz
Esta obra de Gema Albornoz está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Felicidades por tu blog, un abrazo.
Lihem.
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Gracias a vosotros por pasar y darle vidilla a todo lo que quieren decir estas emociones y escenas.
Un abrazo.
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Sencillez, claridad … dices mucho con poco, Gema.
El poema de hoy me ha trasladado a … 1966
Feliz noche
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Feliz viernes de la nuit, Enrique.
Un abrazo.
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Siempre tus versos preciosos.
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Que bonito y romántico Gema. Para enternecer el fin de semana. 🙂 Que lo disfrutes.
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Me alegro que te guste, Antonio.
Que disfrutes del fin de semana. 🙂
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Un placer si podéis disfrutarlos así. 😀
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