Un grupo de flores
bailaban con las estrellas,
boleros, fandangos y pasodobles
en su reunión diaria de doncellas.
Nada les importaban
todas las cosas materiales
pero algo se preocupaban
por las más insignificantes.
Pasaban todo el tiempo
practicando su flexibilidad al viento
poniéndose bellas con sumo cuidado
con contratiempos cada dos por cuatro.
Sufrían y se reponían,
se esmeraban con esfuerzo.
Ya preparadas seducirían
con su primaveral renacimiento.
Gema Albornoz
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Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Emociones encadenadas 
Hay seres, que por su sencillez, no necesitan de reflexiones profundas. En su simplicidad son eternamente bellas.
Qué ternura transmite tu poema!
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Los dibujos de mis sobris siempre me hacen reflexionar más de la cuenta, pero lo que disfruto de ellos, lo que aprendo en las reflexiones y cómo me hacen cambiar de perspectiva es algo que no puedo evitar, ternura incluida. 🙂 😀
Un abrazo, Natalia.
Feliz lunes.
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Como la vida misma. Precioso el poema y el dibujo que lo inspiró.
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Muchas gracias, Eva.
Espero no caer en muchas convencionalidades impuestas, prefiero que hable la inocencia de los dibujos.
Un abrazo.
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Como siempre no dejas de asombrarme por la sencillez con que le das vida a una imagen inocente. Aprovecho para decirte que invito a participar en el reto 3 días de fases favoritas. https://antoncaes.wordpress.com/2015/07/27/reto-en-wordpress-3-dias-de-frases-favoritas-dia-1/ Estoy seguro que te va a gustar este reto. Saludos.
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Muchas gracias, Antonio.
Me pasaré para echarle un vistazo. 🙂
Un saludo.
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