La aguja
que rompió en dos
la última gota.
La gota
que estalló
en un millón de millones
de perlas brillantes.
La perla
que se enganchó a ti
cuando te vio.
Te quedaste con ella,
con la última gota
y con la aguja.
Gema Albornoz
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Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Precioso el poema. Siempre nos quedamos algo de todo lo que pasa. Normalmente nos quedamos con lo mejor y olvidamos todo lo que no nos gusta.
Un abrazo, Gema.
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Tienes razón, Javi.
Pero aunque no sea norma general, debemos quedarnos, alguna vez, también con eso que no nos gusta. 😀
Un abrazo.
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Te quedaste con todo,
Con lo que sentí, con lo que pensé y ahora con mi olvido…
Muy bellas tus letras Gemq
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Mil gracias, Esperanza.
Mejor quedarse con todo y después que quede en el olvido como ese globo de agua.
Un abrazo.
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Estoy de acuerdo.
Un poema precioso con una gran reflexion.
Hay que quedarse con todo.
Solo así se aprende, se evoluciona y se mejora.
Saludos.
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Muchas gracias, Mukali. 🙂
Así es como se sigue adelante.
Bienvenida y saludos. 😀
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¡Qué insaciable! Hay gente que se queda con todo. 😉 😀
Besos y más besos, querida amiga.
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Jajaja.
Besos, Vero.
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