Acepté la invitación
que me ofreció aquel canto.
Escuché aquella voz
que hablaba de mí, de ti y de cualquier átomo.
Vagué, me tumbé, nací y volví a nacer.
Me levanté al reconocer
las maravillas que se repiten.
Estés aquí o no estés.
Extendí mis brazos y me abracé al horizonte.
Y al canto de Whitman que sonaba de fondo.
Aún me queda un año para los treinta y siete.
Gema Albornoz
Esta obra de Gema Albornoz está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Emociones encadenadas 
Y te queda un mundo por descubrir y abrazar…..y muchos cantos a los que sumarte. Porque tú misma eres canto, Gema.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Qué más quisiera, Natalia!
❤ ❤ ❤
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eres un canto!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Vaaaaaaaaaale. :* :* :*
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eeeeeeeeso!! 😉
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Ojo! No es cualquier canto. 😉 Abrazo de oso cariñoso, amiga mía.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Ojo! Que hay que estar a la altura…
Un abrazo, amiga.
Me gustaLe gusta a 1 persona
me encanto, saludos
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchísimas gracias, Eli. 😀
Saludos.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Merry Christmas
Me gustaLe gusta a 1 persona
Merry Christmas, Carl. 😀
Me gustaMe gusta
Me encanta, Gema. Feliz Navidad!
Me gustaLe gusta a 1 persona