Me quedé esperando
con el corazón al filo
de aquella orilla.
Lleno hasta rebosar
drenaban mis ganas
saturadas de echarte de menos.
Quería respirar aire fresco.
Subió arriba
por encima de la nube de polvo.
Tomó perspectiva.
Gema Albornoz
Esta obra de Gema Albornoz está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
Basada en una obra en https://emocionesencadenadas.wordpress.com/.
Emociones encadenadas 
«ganas saturadas»….uffff qué mal rollo…menos mal qué después consiguió una nueva perspectiva. Es inquietante este poema, Gema.
Me gustaLe gusta a 1 persona
¿Si? ¿Así te lo parece? Creo que entre los ingredientes de hoy se me pasó la mano con la melancolía, pero no sé, no sé… 😀
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pues a mí me ha inquietado y me ha invitado a reflexionar.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Y eso es algo que me encanta. 😀 😀
Me gustaLe gusta a 1 persona
A mí me ha resultado un tanto melancólico, pero me ha encantado. Una cosa no quita la otra.
Un abrazote.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eso parece, Javi. Pero algo de melancolía de vez en cuando, no está mal. 🙂
Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Te ha quedado muy Sabina 🙂
Me gustaLe gusta a 2 personas
¡Eso si que es un cumplido, Enrique! Sabina es uno de los grandes. 😀 😀 😀
Jajaja. ¡Muchas gracias!
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Muy bueno! Me gusta mucho.
Gracias.
Me gustaLe gusta a 1 persona
😀 😀
Me gustaMe gusta